domingo, julio 22, 2007

Live Earth

El 07/07/07, más de 150 artistas participaron de un concierto que se desarrolló simultáneamente en distintas sedes distribuidas en los siete continentes. El objetivo, humilde, concreto, era “salvar al mundo”.

Ahora bien, ¿qué tienen en común, por ejemplo, Roger Waters con Enrique Iglesias, Lenny Cravitz con Shakira, o Julieta Benega con Genesis? (las comparaciones podrían seguir, pero no revisé bien la lista... tampoco vi los recitales).
Muy sencillo, todos y todas son “mega estrellas”, en eso se dan la mano.
Son el prototipo de artista que ha podido “subir un peldaño más”; un peldaño más allá de los fanatismos estilísticos (rock, pop, latino, melódico, etc.) y de los reconocimientos locales. Son los artistas que han podido ingresar al “mercado mundial de bienes culturales”. Si, nos guste o no, todos conocemos a Shakira; y no solo por estar en Latinoamérica, parece que si estuviéramos en Alaska también la conoceríamos... son los beneficios de la globalización.

Representante de estas pampas, unos de los felices participantes del show que llegaría a dos billones de personas en todo el mundo, fue nuestro querido Gustavo Chorrati quien, en el marco de este mega-evento, compartiera escenario y audiencia (en forma virtual) con los mismísimos “Metalica” (grupo que siempre aborrecí por ser fanático de Maiden).
¿Qué pensarían los espíritus rebeldes de aquella época donde la dicotomía “heavy-concheto” se manifestaba, a veces de forma extrema, en enfrentamientos francos entre bandos contrarios? ¿Qué sentirá el rockero vernáculo al ver a algunos de sus grupos preferidos compartir ese espacio con el, denominado así por ellos mismos, “puto de Ricky Martin”?

Al parecer, no es que nuestros referentes se caguen en los principios que ellos mismos inspiraron; lo que pasa es que los guía un fin supremo: la defensa de la ecología está más allá de cualquier bandera ideológica o de género musical... dicho y sea de paso, es una boludez pelearse con alguien por que no te gusta la música que escucha... tanto como pelearse por que no te gusta la camiseta que usa el otro...

Me quedé pensando, en realidad, lo que motivó este escrito fue ver esos estadios repletos y, a sabiendas del consumo energético que eso implica, preguntarme si el tema del consumo no tendrá algo que ver con el calentamiento global[1]. Lo que se me ocurrió en un momento es que una manifestación musical contra la contaminación debería, necesariamente, hacerse con instrumentos acústicos, sin amplificación... con todo lo que eso implica[2].

Pero mi pensamiento iba para otro lado: mega-estrellas... mega-estadios... mega-recitales... mega-tecnología para trasmitir simultáneamente a todo el planeta las performances...
¿Qué es lo que posibilita todo esto?
Muy fácil, la globalización depende de un sistema económico particular.
Pero, que carambola!!! Este sistema económico es el mismo capitalismo salvaje de explotación intensiva que degrada el medioambiente!!!
No tengo mucho argumento para afirmarlo, pero tampoco creo que sea fácil refutarlo: si, por ejemplo, el mundo adoptara el precario sistema de producción que tiene Cuba, no tendríamos los problemas de contaminación que llevan a hacer un “Live Earth"; pero tampoco habrían la tecnología y las mega-estrellas necesarias para hacerlo (se da un típico caso de “huevo y gallina”, ¿que fue primero?).
Por que, sobre todo, para ser una mega-estrella, hay que ser multimillonario (y con un sistema de producción que respete el medio-ambiente nadie podría serlo); esto es lo que tienen en común el ex “Black Sabbath” Ozzy Osburne y Madonna. Y acá se terminaron las contradicciones: las mega-estrellas lo son gracias a un sistema económico que arruina el ambiente y somete a la peor miseria a más de la mitad de la población mundial... y organizan un gran recital para manifestarse en contra de ese mismo sistema que los hace ser lo que son... estos hippies modernos...

En realidad, aunque algunos músicos se negaron a participar en el evento por considerarlo hipócrita[3], no creo que haya hipocresía en esto: en “Live Earth" participaron, por un lado, los famosos títeres o inventos mediáticos (que también agarran mucha plata pero es más la que generan a algún empresario invisible) y, por otro, artistas de enserio pero que, o están quemados por venir de la época sicodélica y nos les importa nada, solo tocar, o necesitan mostrarse un poco para no caer en el olvido (caso Spinal Tap) o, directamente, necesitan promocionarse (caso Genesis y The Police con sus respectivas reuniones). Los artistas con escrúpulos, con principios, no se llenan de guita, no son mega-estrellas y, por lo tanto, no pueden aparecer en Live... igual, que no tengan escrúpulos no quita que puedan ser buenos artistas, una cosa no quita la otra.

En fin, que siga la joda, y si va a explotar el mundo, mejor que sea ya.
Para qué esperar sentados, este tiempo acelerado no nos permite darnos tal lujo.

Reportó, desde el centro cívico de Villa Giambruno:
elcersio



[1] Al parecer otros ya se habían preguntado lo mismo; buscando una imagen para el post me encontré con estas críticas puntuales al evento.
http://www.bottup.com/index.php?option=com_content&task=view&id=1489&Itemid=29
http://www.zona82.com/categoria/musica/madonna-y-live-earth-muy-criticados-por-contaminar-el-planeta.html
[2] Parece absurdo, pero un estadio en silencio ante la necesidad de escuchar sería una buena señal de respeto y de que estamos preparados para el cambio... por otra parte, los volúmenes utilizados en conciertos tambien son considerados contaminación.
[3] Los Arctic Monkeys declinaron la invitación por considerar el evento como "hipócrita" y decir que "sólo con la iluminación del escenario, se está gastando luz para diez casas".
El lider de Pet Shop Boys se preguntaba “quiénes somos los músicos para darle al mundo una lección de lo que deben hacer”.